viernes, 30 de septiembre de 2011

A MOGOLLÓN



Como no estaba seguro de que esta expresión tan castiza, al menos hace una década, estuviese recogida en el diccionario de la RAE, me he asomado a su edición electrónica y he comprobado que sí, que "a mogollón" significa en su tercera acepción "en grandes cantidades". Lo que no sabía es que, en sus dos primeras acepciones, significa holgazán y golfo, aunque sí era consciente de que "mogollón" se usa como "lío o jaleo", la cuarta acepción recogida. Cuatro significados que dan para formar por sí solos explicar lo que ha pasado en la SGAE: "menudo mogollón (lío) se ha montado en la SGAE, porque unos cuantos mogollones (golfos) y mogollones (holgazanes) han robado mogollón (un montón) de pasta de la que entraba a mogollón (a raudales) en la sociedad que debería gestionar los derechos de los autores en España.
Hoy hemos sabido algo de lo recogido en el sumario abierto contra parte de la directiva de la SGAE y, de entre todo lo que en él escrito, escandaliza sobremanera que estos "mogollones" (tan golfos como holgazanes) hayan sido capaces de "levantarse" treinta millones de euros en caprichos y minucias, eso sí, mogollón de ellas. Viajes de lujo, gimnasios, lencería, cuentas del supermercado y zarandajas de todo tipo que se cargaban a las cuentas de la SGAE ante los ojos de, si no todos los socios, sí de los más cercanos, porque está claro que, si algunos de no vieron nada extraño, fue porque no quisieron verlo.
De todo este mogollón (lío), los autores deberían sacar una lección clara y rotunda: los mogollones (golfos) implicados en esa enorme y continua malversación se la han estado pegando haciéndoles ver la paja en el ojo de los piratas mientras disimulaban la viga en el suyo, tan piratas y bastante menos respetables.
La de buscar un enemigo exterior, real o imaginario, y el pirateo no deja de ser real, ha sido una estrategia seguida con éxito por dictadores y tiranos y los españoles sabemos mucho de eso, porque mientras e mira al exterior y se hace piña, uno deja de preocuparse por lo de dentro.
Quien haya tenido oportunidad de arrimarse a alguien relacionado con la SGAE sabe de sobra que allí el dinero que entraba a mogollón salía de igual forma y no sólo del modo antes descrito, más cercano al puro robo que a la malversación. También salía dinero a espuertas para proyectos de "amiguetes" que de otro modo no hubiesen sido viables y que han apuntalado carreras que, quizá, no merecían haber sido tan largas.
En fin, vaya mogollón.

jueves, 29 de septiembre de 2011

LA RUBIA DE LA CAJA


"La rubia de la Caja". Podría ser a un tiempo el título de una novela negra o el de una comedia de moda, pero no. En todo caso, la rubia de la Caja, esta señora, madre de familia, se ajustaría a la perfección en la trama de "Crematorio", la excelente novela de Rafael Chirbes en la que se muestran las vergüenzas de la sociedad que hizo posible el ladrillazo, arrasando paisajes y conciencias.
María Dolores Amorós que dirigió la Caja de Ahorros del Mediterráneo hasta su intervención por el Banco de España, una de las primeras cosas que hizo cuando llegó al cargo fue adjudicarse una pensión vitalicia de 370.000 euros anuales que, pese a ser pública, apenas causó escándalo en la opinión pública, entre otras cosas, porque nadie, o casi nadie, se escandalizó desde la prensa por tal prebenda.
Ayer pusieron de patitas en la calle a la señora y no fue por adjudicarse tan escandaloso premio, sino por falsificar las cuentas de la ruinosa entidad que, en lugar de haber ganado los 40 millones de euros que hizo constar en su balance, había perdido más de 1135.
Todo apunta a que la CAM se había convertido en el instrumento necesario para que determinados personajes generalmente bien informados de las intenciones recalificadoras de determinados municipios obtuviesen el crédito necesario para sus aventuras inmobiliarias. Un negocio redondo ese de disparar con pólvora del rey -de los impositores de la caja, en este caso- para cobrarse las presas, si las hubiese. Pero, con la crisis, el tinglado se vino abajo y, con él, las delirantes apuestas crediticias de la caja que bendijo en su día el desarrollismo inmobiliario que apadrinó el PP valenciano.
Sin embargo, sería, no sólo injusto, sino estúpido atribuir únicamente a la señora Amorós tanto desmán. También son responsables esos consejeros que, a sabiendas de lo que dejaban, se premiaron con unos cuantos millones de euros y, digámoslo abiertamente, toda esa prensa que, mientras cubría su cartera publicitaria con anuncios de la CAM y más que dudosas promociones inmobiliarias, se tapaba la nariz y miraba para otro lado.

miércoles, 28 de septiembre de 2011

¡OJO! REBELARSE ES ILEGAL


¿Qué os habíais creído? Hizo mucho daño Rubalcaba con tanta tolerancia como tuvo con todos los que Esperanza Aguirre llama camorristas y pendencieros, esos que anduvieron rondándole el despacho. Hizo daño porque les dio alas. Lo lógico hubiese sido desalojarles de la Puerta del Sol que tiene que estar limpia y despejada, para que los turistas paseen por ellas con sus coca colas y sus bolsas del Corte Inglés, para que puedan hacer fotos y echar monedas a las estatuas vivientes o al indio de bronce que pueblan la plaza cuando el sol ya no es de justicia, mientras ofrecen, inocentes, sus bolsos y carteras a los profesionales amigos de lo ajeno, afectados también por los meses de marea de lonas azules.
Con tanto compadreo, Rubalcaba consiguió que viésemos la cara de todos esos chavales y, lo que es peor, que les escuchásemos. Consiguió que nos enterásemos -y, con nosotros, todo el mundo- de que les angustia ese "no futuro" que les hemos preparado y que, pese a todo, están llenos de esperanza, porque se han visto juntos, saben cuántos son y la fuerza que tienen.
Ha hecho muy mal Rubalcaba, porque esos energúmenos del 15-M son los que acosaron y asustaron a los chicos de la católica JMJ, incluso a los de boina roja y brazo en alto. Porque todos pudimos ver en la red como una de entre ellos interpuso su cara en el lógico, justificado -demasiadas horas de servicio sin poder exhibir sus habilidades- y violento vuelo de la mano enguantada de un mando policial.
Menos mal que la más chula de las presidentas autonómicas lo ha visto claro y no pierde ocasión de abrirnos los ojos. Según ella, no sólo son camorristas y pendencieros. También abogan por la democracia directa que puede llevarnos a la deslegitimación del sistema democrático y a un "golpe de estado" como el de la Francia de 1793. Está claro que la condesa no da puntada sin hilo, porque tuvo mucho cuidado en llamar "golpe de estado" a lo que se enseña en colegios y universidades como "Revolución francesa". No me extrañan sus temores, porque el objetivo de aquellos "sans-culottes" fue la nobleza y ella, como nieta y esposa de conde, lleva ese miedo en los genes.
Pero no seáis demasiado rápidos en la condena, porque lo dicho el lunes por la condesa fue suscrito ayer por Manuel Moix, fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de Madrid que, en su memoria, recordó todos y cada uno de los delitos cometidos por los camorristas y pendencieros: ocupación de la vía pública, obstaculización de la constitución de parlamentos, impedir por la fuerza la ejecución de mandamientos judiciales -de desahucio- y un largo etc. en el que supongo que también figurarían las veces que pasaron en rojo los semáforos del Sol.
En cuanto lo escuche, tuve un presentimiento y quise saber quién era este lince con toga que tan oportuno capote había echado a los pies de la señora Aguirre. Y tenía razón en mis temores. El señor Moix, nombrado por Jesús Cardenal, aquel fiscal general de la etapa Aznar con piso gratis en Madrid y en Bilbao, tuvo oportunidad de ascender hasta el Tribunal de Cuentas, pero prefirió quedarse en la fiscalía del TSJ de Madrid, quizá porque su sucesor iba a ser el presidente de la Unión Progresista de Fiscales.
La tierra tiembla, y no sólo en la isla del Hierro. Por eso no es de extrañar el gesto de este fiscal que, recordándonos la lista de delitos cometidos por los indignados, ha señalado su posición, ahora que puede haber cambios en el mundo de la Justicia.
Sólo espero que todos estos "camorristas, pendencieros y golpistas" que con su dignísima postura influyeron en el voto de casi uno de cada cuatro votantes de la izquierda, sepan ver a quien tienen enfrente.

martes, 27 de septiembre de 2011

EL BROKER CANTAMAÑANAS


Me lo tendréis que perdonar, pero esta mañana de martes no he encontrado nada más atractivo en toda la actualidad que la historia de este tipo, Alessio Rastani, una especie de John Turturro en la Bolsa de Londres que ayer vivió sus quince segundos de gloria contando a las cámaras de la BBC cuál es el verdadero color del dinero.
Me lo imagino apestando a colonia carísima pendiente de las cotizaciones y rodeado de monitores, frotándose las manos mientras el resto de los mortales se aprieta el cinturón por no decir la soga de la que acabará colgándose.
Es un claro ejemplo -y que el 15-M me perdone- de parte de una generación carente de sentimientos y escrúpulos -he conocido a algunos tipos así- para la que el triunfo se construye sobre los cadáveres de sus semejantes. Si gastasen escudo o bandera, su lema podría ser "Si no me sirve, me estorba". Y por eso andan apartando a manotazos a todo aquel que no cuadra en sus planes. Rastani es de esos y hay que agradecerle que haya descubierto tan a las claras las cartas que juega.
Dijo entre otras cosas que sueña con un nuevo crash de la economía, con una nueva recesión, porque eso aumentaría sus beneficios. Dijo también que en doce meses se esfumarán los ahorros de casi todo el mundo. Pero lo que es más de agradecer de todo lo que dijo es que Goldman Sachs, el paradigma de la especulación, gobierna el mundo, que los gobiernos no tienen poder alguno ni capacidad de intervención sobre lo que está pasando.
De ser cierto lo dicho por Rastani -verosímil sí que es- no sé qué hacemos votando y confiando en unos gobiernos inoperantes ¿No sería mejor tomar las nuevas bastillas que son las bolsas? ¿No sería mejor erradicar por ley la especulación de nuestras vidas?
Por desgracia esto son solo anhelos imposibles, porque, si Goldman Sachs o nuestro Alessio Rastani multiplican sus beneficios con la desgracia de los demás, es porque hay gobiernos que les hacen el juego, o al menos lo parece, poniendo dificultades a cualquier cambio en el tablero de juego.
Rastani, Merkel, Goldman Sachs, qué más da uno que otro, todos tienen algo que ver en nuestra desgracia
.

lunes, 26 de septiembre de 2011

LA SUMA DE TODOS


La verdad, acabo de quitarme un peso de encima, porque debo confesaros que, hasta esta mañana, no era capaz de entender el significado del excelente lema de la Comunidad de Madrid. No entendía que, siendo la suma de todos, el gobierno de la comunidad de las siete estrellas y el himno de diseño actuase sólo en favor de unos o que se esforzasase como se esfuerza en actuar con tanto sectarismo contra ese saco de indeseables en el que mete a "piojosos" del 15-M, liberados sindicales, profesores rebeldes y, cómo no, "los de la ceja".
Pensé que el eslogan era una genialidad de los publicistas que tan bien y tan caro trabajan para la señora Aguirre. Tanto, que se invierte más en la campaña publicitaria que en aquello que se anuncia en ella, aunque a veces cometan fallos garrafales, como en el caso de los camaleónicos carteles anti PSOE de las últimas autonómicas, olvidándose de firmar los carteles.
No lo entendía y confieso que me preocupaba, porque el lema me gusta y. de haber sido cierto, también yo me hubiese apuntado a él. "La suma de todos". Hermoso ¿verdad?
Debió ser consecuencia del buenismo y el culto a la brillantez de los mensajes y los lemas que a los de mi generación, la siguiente a la de mayo del 68, nos inocularon toda la poesía y todos los mitos en torno a la revuelta en las calles de París, pero no hubiese dudado en colocarme detrás de una pancarta con ese lema: "La suma de todos".
Lo que he sabido hoy me ha supuesto un verdadero alivio, porque he llegado a la conclusión de que no se trataba de que yo no fuese capaz de entenderlo, sino que se me estaban ocultando datos para poder hacerlo.
El todos del eslogan -queridos amigos- hace referencia a los complementos en los sueldos de Aguirre y sus consejeros. Toda una sutileza que les permite quedar como honrados y esforzados señores ante los "recortados" ciudadanos de Madrid, cuando en realidad son verdaderos truhanes y trileros que escamotean una importante partida de su salario, capaz de mantener sobradamente durante año y medio a cualquier mileurista entrenado.
Por arte de "birli birloque" tan importante parte del salario del "austero" gobierno del Partido Popular no es visible para los ciudadanos, aunque sí para la cuenta corriente de presidenta y consejeros. Hoy nos hemos enterado de que la parte no visible del sueldo de un consejero del gobierno de Madrid, el complemento opaco, es de más de 17.000 euros anuales -no sabemos aún cuanto esconde en el suyo la señora Aguirre- y que algo más de 105.000 es "la suma de todos".

domingo, 25 de septiembre de 2011


Me imagino al sobrero de ayer, en la penúltima corrida celebrada en Cataluña, desconcertado como sus primos que, sin saberlo, fueron lidiados y muertos uno a uno entre palmas, aplausos, algún que otro pito y, curioso, gritos de "libertad, libertad".
Quienes defienden las corridas de torios -y cualquier otro espectáculo que, con lanzas, navajas, fuego o palos, provoque el sufrimiento de tan hermosos animales o cualesquiera otros- han buscado consuelo para sus conciencias negando al toro capacidad para sufrir. Sin embargo, quien haya convivido con animales sabe de sobra que los animales sufren y que, a veces, sufren mucho. A veces ya sufren con el simple desconcierto que supone verse encerrado en un corral, escuchando esos ruidos desconocidos hasta entonces, aunque sólo sea por su intensidad, ruidos sordos o ruidos desatados en las manos o en las gargantas de esos otros animales de extraña piel que, hasta entonces, conocía, a pie o a caballo, pero nunca en tal cantidad. Sonidos extraños tan extraños como ese "Libertad, libertad" coreado contra una decisión libre de un parlamento libre o como ese indignante "Toros sí, moros no", coreado por algunos ante la posibilidad de que el escenario llegase a ser una mezquita.
El sobrero de la corrida de ayer, pariente lejano de los seis toros que se había previsto correr y de hecho se corrieron con diferente suerte -no para los animales, finalmente arrastrados por la arena- sino para los otros animales, los de piel extraña que devuelve en destellos a la luz de los focos. Dos de ellos se quedaron las orejas de sus "enemigos" que enseñaban junto a senyeras, como queriendo catalanizar lo que los representantes de los catalanes no han querido que sea, y el tercero con una bronca de quienes llenaban las laderas de ese arenal redondo regado ya con su sangre, al que -aún no lo sabía- tendría él que salir.
El pundonor y los celos llevaron al hombre fracasado a pedir "el sobrero". Y nuestro amigo que nunca sabría que el sobrero era él tuvo que salir. Las laderas del redondo arenal se entusiasmaron entonces y los celos y el pundonor del hasta ese momento fracasado consiguieron congraciarle con ellas.
Al final, todos contentos, salvo el sobrero y sus hermanos de especie que, sin saberlo, fueron el instrumento de una mal llamada fiesta en la que se viste de seda y oro, de mantillas y claveles, de machos y hembras, de sexo y poder, el sufrimiento de tan hermosos animales.
Y esta tarde más y con más mística si cabe. Menos mal que el sobrero de la última corrida celebrada en Cataluña y sus seis hermanos no leen la prensa ni escuchan la radio.

sábado, 24 de septiembre de 2011

CREER O NO CREER


Paradojas de la vida. Una medición de la velocidad de los neutrinos, esas partículas atómicas tan poco aficionadas a manifestar su polarización y que en un hipotético parlamento de la materia irían a alguno de los grupos nacionalistas o incluso al mixto, ha desatado la imaginación, si no el delirio, en algunas sesudas redacciones, poniendo en duda la mismísima teoría de la relatividad de Einstein que había venido explicando lo que hasta ahora hubiese sido inexplicable de otro modo y poniendo a sus redactores más imaginativos a elucubrar sobre viajes en el tiempo o a destinos hasta ahora inalcanzables. Y eso, a pesar de que el dato, el asombroso resultado de la medición, ha sido puesto en duda por los propios autores del experimento.
Curiosamente, las mismas redacciones no han tenido la fe necesaria para imaginar un próximo fin de ETA, pese a señales tan evidentes de que se acerca como el comunicado del colectivo de presos de la banda publicado hoy por Gara y filtrado ayer en su esencia, anunciando su decisión de poner fin a la violencia y de reconocimiento de las víctimas, pese a que tal colectivo, cercano al millar de presos, ha sido uno de los más duros de la organización terrorista.
Una y otra reacción me lleva a pensar que la gente sólo ve aquello que quiere ver y que, por terrible que parezca, hay quien se sentiría incómodo con un inmediato final de ETA.
Evidentemente, ese comunicado está sembrado de espinas, como la petición de amnistía y autodeterminación o la falta de exigencia de disolución a la banda, que no son más que los clavos ardiendo a los que se agarran quienes desde una y otra posición han rentabilizado su violencia.
¿Por qué se les hace tan difícil a algunos darnos buenas noticias?
Está claro que son más dados a que comulguemos con ruedas de molino si estas giran a su favor, hasta el punto de hacernos creer que algunos harán en el gobierno de la nación algo distinto de lo que ya están haciendo en las autonomías en que deciden.
Hace un par de días escuché a Ismael Serrano, que en la presentación del último libro de su hermano Daniel, citaba a Gramsci en su condena a los indiferentes. Mucho me temo que, otra vez, estamos en sus manos y en las de quienes les filtran su realidad interesada.

viernes, 23 de septiembre de 2011

EL APOCALIPSIS DE TODOS LOS DÍAS


Lo malo que tiene la experiencia es que, en la misma medida que uno va recibiendo datos, disfrutando alegrías y sufriendo decepciones, uno va también generando los mecanismos que determinan las que van a ser sus reacciones ante situaciones similares.
¿A cuento de qué viene esto? Pues viene a cuento de que, desde hace demasiado tiempo, cada día me despiertan las trompetas del Apocalipsis que soplan desde los "parqués" de Tokio y Nueva York en un eterno ritornelo el Down Jones y el Nikkei, anunciando el fin del mundo, unos días, y el regreso a los días de vino y rosas otros.
Tantas veces me he despertado temiendo que se desplomase el cielo azul que, como dice el tango, ni es cielo ni es azul, que ya le he perdido miedo al fin del mundo. Es más, uno aprende a hacerle pedorretas al destino, hasta el punto de que de vez en cuando se agradece que la amenaza se torne en riesgo de morir descalabrado por la caída de un satélite del tamaño de un autobús, sin que se precise el tipo de autobús, algo que ayudaría mucho a tomar las medidas oportunas.
Supongo que a estas alturas tendréis ya claro que creo poco o nada en los mecanismos que mueven la economía. Es más, si nos detenemos a analizar las justificaciones que nos dan un día detrás de otro para explicar lo que pasa, comprobaremos con espanto que esas explicaciones se vuelven reversibles para glosar situaciones opuestas.
No creo en la economía, aunque, por desgracia, sí en sus consecuencias. Lo que sí es que, cuando toda la riqueza esté en manos de unos pocos y terminen por dejarnos en cueros, el mecanismo se agarrotará porque, para que algo tenga valor, hay que ponerlo en el mercado y, si no hay quién compre, no hay mercado.
Casi nada es lo que parece. Ahí tenéis en qué ha quedado la todopoderosa SGAE, tapándose como puede las vergüenzas, o el elevado pensamiento de los miembros del Consejo de RTVE, reducido, salvo dos honrosas excepciones, al de esa pandilla de pelotas del "cole" que se ofrecían a vigilar a sus compañeros cuando el profe dejaba la clase.
Volviendo a la economía, la primera lección en esta materia me la dio mi abuelo, el "tío tendero" de Espinosa, que, entre bromas y veras, presumía de haber partido un queso por la mitad para poner a la venta ambos trozos a precios distintos, eso sí. La lección estaba en que insistía en que siempre vendía primero el más caro.
Aunque no lo creáis, ayer tuve una buena noche entre amigos, lo que ocurre es que este otoño que no lo es me ha vuelto un poco más escéptico.

jueves, 22 de septiembre de 2011

EL TÚNEL DEL TIEMPO


Cuando hace ya treinta años entré en la Redacción de Informativos la SER, todavía había pesadas y ruidosas máquinas de escribir, teletipos machacando papel y mesas de madera llenas de quemaduras de cigarrillo, porque, entonces, se fumaba, y cómo. Había todo eso, pero no había censura o, al menos, yo nunca la sentí.
El recuerdo de tal aberración sí estaba presente. De hecho, nuestra secretaria de redacción, la querida Aurita, tierna e implacable a voluntad, bromeaba atribuyendo lo peor de su carácter a que durante mucho tiempo revisaba previamente todo lo que se decía ante el micrófono que, "naturalmente", iba por escrito.
Yo, que viví mis primeros veinte años bajo el franquismo, me sentía orgulloso de la que iba a ser mi profesión y, como casi todos mis compañeros, quería cambiar el mundo. Luego, llegaron las pantallas y los textos verde fosforito de los ordenadores y el temor al control que, si lo hubo, tampoco lo noté. Con el tiempo, y ya desde afuera, comprendí que el control no es hijo de la tecnología, sino de la voluntad de quien tiene poder para hacerlo. Y, si os digo la verdad, echo de menos una Aurita culta que revisase los textos que se han de poner en antena, no para ejercer la censura sobre su contenido, sino para velar por el lenguaje, tan maltratado en los tiempos que corren.
Y hasta aquí la nostalgia, porque el motivo de esta entrada es la ignominiosa aberración aprobada ayer por el Consejo de Administración de RTVE, porque tener acceso a la información que están elaborando los profesionales de los telediarios en cualquier momento del proceso es un insulto a la inteligencia de esos profesionales y de quienes seguimos su trabajo en los telediarios.
Tamaño despropósito ha visto la luz con el voto a favor de PP y CiU, la abstención, cogiéndosela con papel de fumar, de PSOE, ERC y CCOO, y el voto en contra de IU, UGT y el Consejo de Informativos de "la casa" que quizá fuese el único con derecho a opinar sobre el asunto. Lo más alucinante de todo es que tal medida se aprueba cuando las cadenas públicas han alcanzado sus más altos niveles de audiencia y de aceptación y sus telediarios son los más seguidos por los telespectadores.
Cabe preguntarse qué pretende el PP con tamaña cacicada y, así a bote pronto, se me ocurren dos razones. Por un lado, interferir y emponzoñar todo lo relativo al proceso electoral que se avecina y afilar la guadaña que, si actúan como lo han hecho hasta ahora, pasaran por la redacción si ganan las elecciones para segar tanta mala hierba como, en su opinión, crece en ella.
Sea como fuere, soportar una televisión intervenida cuyos telediarios acaben pareciéndose a los de Telemadrid, hundida en los índices de audiencia y dirigida desde la Puerta del Sol y no por el 15-M, o las portadas de La Razón o El Mundo. Eso por no hablar de una Escuela Pública desmoronándose por falta de recursos frente a la ideologizada la privada, cada vez más mimada y subvencionada, o de una Sanidad Pública relegada al papel de beneficencia y gestionada por las mismas empresas que controlan la exclusiva sanidad privada, de modo que, a partir de ahora, la gravedad del diagnóstico dependerá del estado de la cuenta corriente del paciente.
Es como un viaje al pasado, a las familias desahuciadas por la enfermedad del que trae el pan, a los colegios para pobres y ricos y al "parte" de las dos y de las nueve con su fanfarria y toso. Un viaje al pasado a través de un túnel del tiempo del que nosotros, y sólo nosotros, tenemos la llave. Si hasta ahora he tendió alguna duda sobre qué debo hacer el próximo 20-N, hoy se perfectamente lo que debo hacer que no es otra cosa que meter esa llave que tengo, mi voto, en las urnas correspondientes y dársela a quien con más fuerza pueda oponerse a esta vuelta atrás en el tiempo.

martes, 20 de septiembre de 2011

A LO MEJOR...


No sé si fue el exceso de horas de secador o la tensión del encuentro con el rey, ya que no hay excesiva simpatía entre ambos, pero lo cierto es que la presidenta madrileña se mostró ayer, a la salida de Palacio más atropellada y "alomejorista" que nunca.
Se le nota en exceso que está acostumbrada a hablar con gente que tiene bajo su autoridad -consejeros, asesores, personal a su servicio y todo tipo de pelotas y admiradores acríticos- y se le nota, porque coge el carril, se crece y olvida que lo que dice delante de la prensa, a pesar del control que ejerce sobre gran parte de ella, se va a mirar con lupa y va a llegar a todos los rincones convenientemente corregido, aumentado y opinado.
Ayer volvió a hacerlo y en esta ocasión no puede esgrimir la excusa de que sus palabras fueron "robadas" o sacadas de contexto. Dijo lo que dijo y lo dijo delante de micrófonos y cámaras. Y, pese a que se han cargado las tintas en educación, también "alomejorizó" sobre sanidad y no con menores consecuencias, porque insinuó algo indeterminado y sospechoso respecto a que la sanidad pública se haga cargo del cuarenta por ciento del importe de los medicamentos. Concretamente dijo que "si cada vez somos menos los que pagamos el cuarenta por ciento" a lo mejor... A lo peor, me temo, que lo que quiso decir es que va a haber que dejar de subvencionar los tratamientos.
A lo que dijo sobre la obligatoriedad y la gratuidad de la educación se le ha dado mucha más difusión y, pese a que ha tratado de maquillarlo desde su twiter aduciendo que se refería a los "másteres" -qué feo "palabro", teniendo como tenemos "maestría" en el diccionario de la RAE- como esos niños que dicen que el perro se ha comido los deberes o, en mis tiempos, que se había ido, porque se iba con frecuencia, la luz.
Esperanza Aguirre encarna a la perfección a todos esos "borrokas" de la derecha -para serlo no hace falta ser joven ni de más arriba de Pancorbo- que consideran que ellos, y sólo ellos, están pagando los estudios de los hijos de los inmigrantes y las operaciones de quienes hacen "turismo sanitario" y que, puesto que ellos pueden pagarse su Colegio del Pilar y su Clínica Ruber, para qué van a pagar con sus impuestos la sanidad y la enseñanza pública. Curioso, cuando se pasan la vida "escaqueándose", con o sin asesores fiscales, de Hacienda.
Quizá lo que quiere Esperanza Aguirre es que volvamos a aquellos años en que la gente se moría de un cólico miserere o una gripe mal curada o perdía el trabajo por una enfermedad más o menos grave y prolongada. Quizá quiere volver a los años en que los niños eran arrancados de la escuela para entrar de aprendices o chicos de los recados en talleres y tiendas, salvo que fuesen, como ella, hijos de buena familia o que un cura, con mejores o peores ojos se hubiese fijado en ellos, para mandarles a estudiar al seminario.
Hoy hay convocada una jornada de huelga en la enseñanza pública en Madrid y otras comunidades y quizá pronto tenga que haberlas en la sanidad pública. Me gustaría creer que la defensa de la calidad de estos servicios que hacen sus trabajadores fuese entendida y respaldada también por el resto de los ciudadanos. Ya hubo una Tatcher en el Reino Unido y bastó su paso por el gobierno para asolar uno de los más amplios sistemas de protección pública. De paso, se deterioraron la enseñanza, la sanidad, los transportes y la seguridad.
¿Es eso lo que queremos? ¿Dejar a los jóvenes sin trabajo y sin escuela? Este verano hemos visto los resultados en Tottenham, hace no tanto los vimos en Marsella y la banlieu de París. Si no le ponemos remedio, mañana puede ser en Villaverde o Vallecas.
Insisto ¿Es eso lo que queremos?

lunes, 19 de septiembre de 2011

MACHOTES

Qué fácil lo tienen. Es tan sencillo. Basta con engatusar a la presa, conquistarla, apartarla de los suyos y aislarla después. Una vez que la ha privado de su conexión con los demás -a veces ni siquiera tiene paciencia para ello- la "doma" a base de reproches, prohibiciones, menosprecio e insultos. Es decir, se le priva de la autoestima. En ocasiones se le carga de hijos y de obligaciones hasta convertirla en un pelele que siempre estará en el rincón, con la casa limpia, la comida lista y el sexo dispuesto. Aquella mujer joven y radiante que conoció ya no existe. Ya ni siquiera le atrae como entonces, pero es "suya" y ya no será de nadie.
Esto que en este país se ha vivido demasiadas veces; esto que algunos toleran porque deciden que forma parte de la vida privada y otros lo atribuyen a la tradición o, incluso, a la cultura, está cambiando poco a poco.
El cambio está en que la mujer ya no se resigna a ser ese juguete roto de "su" hombre. El cambio está en que se sabe autónoma y en que ya no necesita del permiso del macho para tener un trabajo o una cuenta corriente. Es un avance, pero los machotes se rebelan y se obsesionan con el "mía o de nadie", convirtiéndose en juez y verdugo de su pareja, haciéndoselo perdonar con ese gesto cobarde del intento más o menos exitoso de suicidio.
No puede ser que un machote celoso trate de privar a una mujer de lo que tantos siglos ha costado arrancar a la sociedad. No puede ser que haya mujeres aterrorizadas, esperando a que su pareja vuelva a casa de buen humor.
Evitarlo es una tarea de todos. En primer lugar, de las madres que deben enseñar a sus hijas que, por mucho amor que haya, nadie tiene dueño, y que deben enseñar a sus hijos que nunca deben someter a esa mujer que dicen amar. También es una tarea de nosotros mismos, de la sociedad encarnada en cada uno de los vecinos que, en lugar de subir el volumen de la tele, cuando estalla una discusión entre un hombre y una mujer, debemos bajarlo y, si es preciso, intervenir o llamar a quien pueda hacerlo. Es una tarea de las amigas o de las compañeras de trabajo que deben sospechar de determinados accidentes domésticos, sobre todo cuando son frecuentes.
Y es también un asunto de jueces y fiscales que nunca deben tomar a la ligera las denuncias de mal trato que llegan a sus manos, porque es muy largo y muy doloroso el camino que recorre una mujer hasta llamar a la puerta del juzgado.
Este fin de semana tres hombres han acabado con la vida de sus parejas. Una de ellas había pedio el alejamiento de su verdugo y se lo negaron. Seguro que el juez que se la negó y los familiares y vecinos que nada hicieron en ese y en otros casos encuentran una explicación para su actitud. Sólo espero que no les sirva para su almohada.

domingo, 18 de septiembre de 2011

QUÉ POCO ME GUSTA BONO


Qué poco me gusta este señor. Supongo que a quienes siguen este blog no les sorprenderá lo que digo, porque nunca lo he ocultado, a veces más allá de la prudencia. Acabo de escucharle en el encuentro que Montserrat Domínguez ha organizado para su programa en el plató en que se graba la serie "Cuéntame cómo pasó".
Participaban en el programa, una evocación de la transición. Nicolás Sartorius, José Ignacio Wert. José Martí Gómez, Javier Rupérez y el ya citado José Bono que, como siempre, oficiaba de "reina madre". Lo más curioso, no para mí, es que frente a la actitud discreta del resto, la del todavía presidente del Congreso ha sido la de siempre: dar lecciones a diestro y siniestro, a veces con tal fragilidad en sus argumentos que alguno de sus contertulios, José Ignacio Wert, no ha dudado en corregirle.
Sin embargo, cuando se me han llevado los demonios, que diría cualquier abuela, ha sido cuando le he escuchado descalificar a un representante del 15-M que ponía en duda la credibilidad de Rubalcaba para emprender la reforma fiscal, subrayando lo bien que pronunciaba las eses para dar a entender que era un "pijo" del barrio de Salamanca.
Debería saber el eternamente sonriente señor Bono -incluso posando junto a asesinos como Obiang- que muchos de nuestros jóvenes hablan un español magnífico y que no sólo eso, sino que piensan y, a consecuencia de ello, dudan y no se dejan llevar por quienes, como él, gustan de la demagogia, los mensajes facilones y la propaganda chusca.
No seré yo quien desconfíe del candidato Rubalcaba, pero tampoco de los jóvenes del movimiento 15M, el propio Rubalcaba no lo hace. Sí desconfío, y mucho, de quienes unas veces los ven como piojosos y otras como pijos "del barrio de Salamanca".
Gracias al sistema educativo que algunos se quieren cargar hay jóvenes, no sólo bien hablados, sino también bien pensados, en barrios como el mío de Carabanchel, del mismo modo que hay gañanes en la calle Serrano.
Por lo demás, el señor Bono que, afortunadamente para ella, ha emparentado a su hija mayor con el cantante Rafael y la hija del marqués de Santo Floro y tiene otro hijo que ha hecho de la hípica, deporte de barrio donde los haya, su medio de vida. Es más, el propio Bono es propietario de un negocio en el sector que a veces olvida declarar entre sus bienes ¿Será ahí donde ha aprendido a distinguir el habla de los pijos?

sábado, 17 de septiembre de 2011

TARDE Y MAL

Como casi siempre -y siento tener que decirlo- la justicia, también en la condena a Otegi y Usabiaga, se ha pronunciado se ha pronunciado tarde y mal. Estoy seguro de que los fundamentos jurídicos en que se basa la condena son impecables. Pero también lo estoy de que del mismo modo serían impecables otros que hubiesen llevado a una sentencia más benevolente.
Quienes defienden la divisa "dura lex sed lex" defienden también que la justicia se aísle de la sociedad para cumplir con su función de aplicar las leyes- Yo, sin embargo, creo que tal cosa, más que una virtud, es un defecto, porque las leyes, duras o blandas, responden siempre a momentos sociales y formas de pensamiento determinados. La tarea de los jueces debería ser, por tanto, la de interpretar y acomodar esas leyes a las circunstancias en que ve la luz la sentencia. De otro modo, bastaría con disponer de un potente ordenador, con el software adecuado, para obtener sentencias jurídicamente impecables.
Está claro que la situación actual no es la misma que la que vivíamos en el momento de producirse los hechos ahora condenados. Estaríamos hablando de un tiempo en el que ETA había frustrado con un brutal atentado, el de la T4, cuyo resultado -dos muertos- se le escapó de las manos si es que alguien puede pretender tener el control cuando hace estallar centenares de kilos de explosivos.
Hoy ETA debate, no ya si debe desaparecer, que parece claro que sí, sino cómo hacerlo y en ese debate son importantes todos, también quienes, como Arnaldo Otegi y Rafael Díez Usabiaga, han gozado y sin duda gozan de una cierta "autoridad" a uno y otro lado de la banda.
Diez años son muchos años para cualquiera y ambos ya no son unos chavales. Sólo espero que alguien tenga la claridad de ideas como para morigerar una condena tan dura y, sin darle la espalda a la ley, corregir esta sentencia que podría, aún no sabemos si lo hará, abrir un abismo allá donde comenzaban a tenderse puentes.
De momento, la reacción de Otegi ha sido más prudente que la de algunos políticos y opinadores. El que fuera portavoz de la llamada "izquierda abertzale, ha pedido que se siga el camino de abandono de la violencia emprendido a lo largo de todo ese tiempo que la justicia ha tardado en condenarle.

viernes, 16 de septiembre de 2011

OJO, QUE ESOS LOS TENGO


Recuerdo cómo, en los tiempos de mi infancia, circulaba un chiste, tan ingenioso como reaccionario, con el que se pretendía poner en evidencia que las circunstancias influyen más en la ideología que ésta en aquellas. El chistecito en cuestión, ambientado en una de las afortunadamente hoy desaparecidas dictaduras comunistas de los países del este, cuenta como se pone a un campesino ante la disyuntiva de repartir sus fincas, sus tractores, sus coches o sus casas con "el partido", hasta que se le pregunta si repartiría también, de tenerlas, sus vacas. Es en ese momento cuando el campesino, generoso y solidario hasta entonces, advierte "un momento, que las vacas las tengo".
No sé por qué, pero tengo la impresión de que algo así está pasando con algún que otro "líder de opinión" -contertulio de la muerte, vamos- y el impuesto sobre el patrimonio que reactivará hoy el Gobierno en Consejo de Ministros. Son muchos los que, desde sus cómodas y bien remuneradas tribunas, no dejan de ver inconvenientes a la medida.
Los hay que advierten que la reactivación de impuesto sobre el patrimonio apenas va a suponer unos cuantos millones de euros en el total de la recaudación y que sería más simbólico que realmente eficaz.
Y qué, les contestaría yo ¿Vamos a dejar de gravar la compra de yates de lujo, porque, al fin y al cabo, no hay tantos?
También los hay que cuentan el cuento de los dos hermanos que reciben un premio de la lotería y lo dividen a partes iguales. Uno de los dos hermanos, prosigue el cuentecito, gasta en poco tiempo lo que recibe, en tanto que el otro conserva intacta su parte. La moraleja, más que "aguirriana", pretende hacernos ver que se castiga al que crea riqueza y se premia al que recibe. Falso de toso punto, porque nos hurtan el dato de que el derrochador ha pagado el IVA en todo lo que ha comprado, bebido, comido o viajado, con lo que no sólo contribuye a generar riqueza en quienes fabrican, venden, destilan, cocinan, regentan o mantienen todo aquello que compra o alquila, amén de contribuir con el impuesto a la riqueza del país.
Los hay también que dicen que la medida no es más que maquillaje ideológico para dar satisfacción a los votantes del PSOE. Pues ya era hora de que, por una vez desde que comenzó esta maldita crisis, el gobierno recuerde que quienes le votamos estamos cansados de soportar el peso de la misma.
Creo que quienes hacen este tipo de comentarios, con más o menos brillantez o, por qué no decirlo, con más o menos demagogia, lo que están queriendo decir es "Ojo, que los 700.000 euros los tengo".

jueves, 15 de septiembre de 2011

POR RICO, POR GUAPO Y POR BUENO


Hacía bastante tiempo que no escuchaba declaraciones de Cristiano Ronaldo y os aseguro que, callado, me parecía mejor jugador. Lo siento, pero es así. No creo que se contrate a los jugadores para que, con su silencio o su prudencia, parezcan -o al menos a mí me lo parezcan- más grandes. Más bien creo que esas grandes empresas que son hoy los clubes los fichan para hacer caja de goles y de perras y no dudo que hay quien piensa que haciendo más ruido entran más perras en el cajón.
Ha sido curioso comprobar cómo, en ese tiempo que terminó ayer, el silencio de Cristiano ha coincidido con los excesos de alguien a quien tenía por prudente, Iker Casillas, que, a mi modo de ver, recorría en sentido contrario el camino hacia la moderación que yo quería ver en Ronaldo.
Aunque admiro, y no lo oculto, la actitud de Messi en el campo al que, difícilmente, vemos quejarse "de vicio" o fingir sobre la hierba, reconozco que a Cristiano que, al contrario que el argentino, se adorna en exceso y parece buscar la humillación de los defensas rivales, le llueven las patadas y los golpes en mayor cantidad que a Messi. Y ayer tuvimos prueba de ello.
Quizá por ello y porque es muy difícil que estos héroes, adulados y consentidos en exceso cuando apenas han alcanzado su madurez como hombres, olviden al niño de barrio que, gracias a su habilidad con el balón, consiguió dejar los barrizales en que aprendió a hacer magia con él. Y a veces ese niño les sale por la boca y pone en evidencia la simpleza de su pensamiento.
Ayer, después de un partido duro, en el que los defensas del Dinamo golpearon hasta la sangre uno de sus tobillos, Cristiano no pudo callar ante los silbidos que, un día sí y otro no, acompañan sus lances en el campo. No pudo callar y habló. Y lo que dijo no puede interpretarse más que como el desplante de un chavalín de barrio que ha salido del barro: "Me silban porque soy guapo, rico y buen jugador y me envidian".
No sé si fue por eso por lo que se llevó el abucheo, pero he de reconocer que, por una vez, consiguió enternecerme.

miércoles, 14 de septiembre de 2011

PATRIMONIOS


Qué tranquilo me he quedado. De todas las noticias del día, las que nos hablan de la tragedia griega, con trío Merkel, Sarkozy, Papandreu incluido y a punto ya de ser de todos; sobre las protestas de interinos, 15-M, sindicalistas y los de la ceja contra los recortes en educación; sobre las encuestas, que no pueden ser más desalentadoras para los que todavía creemos en lo público; sobre la violencia en Afganistán o Irak, o sobre la falta de imaginación de mi Barça que, juegue como juegue, parece haberse abonado al 2-2 como resultado... de todo lo que he podido encontrar en los periódicos lo que más me ha interesado, y tranquilizado al mismo tiempo, es saber que la resurrección del Impuesto sobre el Patrimonio no me va a afectar porque estoy por debajo del mínimo de un millón de euros, a partir del cual se va a aplicar.
Si yo, que he podido trabajar a lo largo de casi tres décadas y bien pagado en los últimos años, no llego a ese mínimo exento, puede explicarme el PP a quién pretende defender oponiéndose a que vuelva a aplicarse. No será, desde luego, a eso que denomina "la mayoría de los ciudadanos", salvo que su vista sea peor que la mía y no le alcance para ver a quienes abarrotan el metro y los autobuses en las tres primeras horas de servicio, o a quienes esperan, a veces horas, para pasar consulta con su especialista de la red sanitaria pública, o a los que mandan a sus hijos a un instituto público con la esperanza de que la educación les dé las armas de que carecieron ellos en los difíciles años que le tocó vivir.
A lo mejor, lo que pretende defender el PP es ese "atado" de fincas, palacios e inmuebles que poseen condes y condesas por haber nacido en su cuna y no en una maternidad pública que, muchas veces, es el lugar más confortable y limpio que van a conocer en su vida; o esas grandes dehesas que se compran los toreros por jugarse la vida alguna que otra tarde, frente a un animal que, haga lo que haga, siempre acaba perdiéndola; o a esos deportistas de élite que acumulan fichas, sueldos, derechos de imagen o de televisión, que se gastan al día en perfume lo que se gastan a la semana demasiadas familias en comida.
Aunque, a lo mejor a quien defiende es a quienes, desde el lado oscuro, como el exbanquero que posa en la foto, han construido enormes patrimonios embaucando o especulando, lo que no deja de ser otra forma de engaño, o con la explotación de los demás y de los antepasados de los demás a lo largo de los siglos.
No sé si a los que creéis os sirve de consuelo pensar que, quizá, todas estas presuntas "víctimas" del Impuesto sobre el Patrimonio acaben pagando sus excesos en el más. A mí, que no creo, me parece "de ley" que den una parte de lo que tan fácilmente ganan, roban o heredan, por más simbólica que sea, para que a quienes menos tienen les llegue un poco más.

martes, 13 de septiembre de 2011

RATAS


Tienen las ratas muy mala fama como gente de mar. Tan mala, que dicen de ellas que son las primeras en abandonar el barco cuando se hunde. Y no sé por qué. Al fin y al cabo si ellas están en el barco no es para conducirlo a buen puerto o como pasajeros que han pagado para que les lleven. Si las ratas están en el barco, es porque en el barco hay algo que les interesa. Pero, cuando el riesgo de naufragio pesa más que lo que les retiene en la nave, no dudan en dejarla, como gente práctica que son.
Ayer, Bono y Gabilondo anunciaron que no acompañarían a Rubalcaba en su travesía del 20-N. Ambos dijeron que no figurarían en las listas del candidato que lo ha tenido más difícil desde que el bueno de Joaquín Almunia ocupó el cartel socialista frente a Aznar. Sin embargo sería injusto hacer tabla rasa con uno y otro, porque la vida pública de Bono se ha forjado a lo largo de casi cuatro décadas, desde que formara parte del despacho de abogados de Raúl Morodo, en el PSP de Tierno, primero, y en el PSOE, después, en tanto que el prestigio del ministro Ángel Gabilondo era ya sobrado en la Universidad antes de que aceptase el reto de aceptar la cartera de Educación en el gobierno de Zapatero.
Por eso me duele que se agrupen y enfrenten las decisiones de Bono y Gabilondo con la respuesta que, también ayer, dio Manuel Chaves al abandono de Bono, hablando de vías de agua y la gente que se da prisa en abandonar el barco, haciendo esas reservas sobre lo dicho que se hacen después de sincerarse, poniendo el mismo gesto que ponen los malos defensas cuando pasan la guadaña al delantero rival.
En este punto he de decir que entiendo a Bono, porque haber estado casi cuarenta años enredando, siendo guerrista y lo contrario, felipista y antifelipista, rival de Zapatero y su primer mariscal de campo; haber sido socialista y rico propietario, cristiano de base y católico amante del boato cardenalicio, debe de ser un impedimento para quedar en diputado de base, especialmente, cuando se ha echado el pelo en la Presidencia del Congreso.
Espero que a nadie le hayan sorprendido una y otra decisión, aunque sus motivos que les han llevado a ellas sean tan diferentes. Ahora bien, que nadie espere que Bono se quede quietecito y callado. Tiene mucha soberbia y demasiadas cuentas pendientes.

lunes, 12 de septiembre de 2011

¿Y SI FUERA ASÍ?

Escuchaba esa tarde "La Ventana", cuando un ciudadano griego que contaba desde Atenas cómo se vive allí, en el epicentro de la crisis europea, todo lo que está pasando, ha dado con lo que, a mi modo de ver, podría ser una de las claves del asunto.
Decía este ateniense que, por ejemplo, los escolares van a comenzar el curso con fotocopias y DVDs en vez de libros y que, según cuentan las malas lenguas, los millones de copias necesarios le habían sido encargados a alguien vinculado familiarmente a la cúpula del ministerio de Educación. Venía esto a cuento de las acusaciones de corrupción en Grecia lanzadas desde Alemania, y explicaba este ciudadano que poco parecía importarle la corrupción a Alemania cuando una de sus empresas, la Siemens, se beneficiaba de grandes contratos del gobierno griego o cuando Grecia compraba armamento muy por encima de sus necesidades a empresas también alemanas, para añadir que, ahora que Alemania ha encontrado otros mercados en el Este, Asía o América Latina, puede permitirse el lujo de dejar caer a quienes hasta ahora han sido su mercado.
Todo lo dicho por quien creo que se llamaba Cristóforo me ha llevado a elaborar esta teoría que, si bien puede ser un tanto tramposa, no deja de ser verosímil. ¿Y si Alemania, junto a Francia, nos llevó al euro, atándonos de pies y manos para devaluar y, como consecuencia, imposibilitados para recuperar por vía de la exportación parte del déficit acumulado, al no resultar competitivos nuestros productos? ¿Y si Alemania está copando ventajosamente mercados en los que podríamos ser su competidor?
No sé si es verdad, pero podría serlo, y de ser así estaríamos condenados a quedar como un bonito y barato destino turístico o como una gran residencia de la tercera edad para los poderosos jubilados de la Europa del Norte.
Si fuese cierto, apañados estaríamos.


domingo, 11 de septiembre de 2011

CLAUSEWITZ EN LA PUERTA DEL SOL


Está claro que, pese a tanta misa y tanta mantilla, en la Real Casa de Correos de la Puerta del Sol de Madrid se lee más a Carl von Clausewitz en su tratado "De la Guerra" que los Evangelios. Tiene razón el candidato Rubalcaba que, en un foro sobre Educación organizado por su partido, afirmó ayer que la Esperanza Aguirre está criminalizando al profesorado y demonizando la docencia, siguiendo así una de las premisas del arte de la guerra, la criminalización del adversario como paso previo para cualquier acción que se pretenda emprender contra él.
Bien es verdad que tan exagerada campaña, basada en una presunta vaguería del profesorado o en acusaciones de que los docentes se están dejado manejar por los "violentos" del 15-M se vuelve contra quien la emprende, entre otras cosas porque los padres de alumnos suelen conocer a los profesores de sus hijos y saben que no es difícil encontrarles fuera de las horas de clase dispuestos a atenderles. Pero la guerra es así, se inventa un monstruo y luego se le muele a palos, sean estos físicos o morales.
Es una pena que la miserable cortedad de miras de este gobierno regional está causando tanto daño en la enseñanza como lo causó en su día la ofensiva contra el doctor Montes, responsable de la Urgencias del Hospital Severo Ochoa de Getafe, acusado por el entonces consejero de Sanidad Manuel Lamela poco menos que de ser una especie de ángel exterminador, consiguiendo que, desde entonces, pocos médicos se atrevan a tomar la decisión de aliviar el dolor de los enfermos terminales en la sanidad pública, porque, para eso están, claro, las clínicas privadas.
Cuando escribo esto, cinco representantes del profesorado que decidieron encerrarse en la Dirección Territorial de Madrid de la Consejería de Educación y que, desde el viernes, han sido recluidos bajo vigilancia de guardias jurados en un salón de actos sin ventanas, privados de todo contacto con el exterior, como si de delincuentes se tratase.
La consejera Figar, de parecida textura a la de una virgen románica, no ha tardado en contestar a lo dicho por Rubalcaba, acusándole de ser el responsable del fracaso escolar, el paro juvenil y de la gestión del movimiento 15.M, que tan preocupada parece tenerla.
Lo cierto es que la Comunidad de Madrid ha sido absolutamente tendenciosa con los profesores y que de manera torticera, con mentiras o verdades a medias, ha puesto a los pies de los caballos a todo un colectivo que, pese a que cuenta entre sus filas con elementos muy concienciados, es, en general, bastante conservador e inclinado al inmovilismo. Colocarlo a lado, no ya de los seguidores del 15-M, sino de los que "agredieron e insultaron" a menores participantes en la JMJc. Lo que me lleva a pensar que las acusaciones de Figar son tan consistentes como las otras, porque, que yo sepa, si hubo menores agredidos fue, precisamente entre los simpatizantes del 15-M, entre ellos la adolescente que recibió una descomunal hostia seca y no de oblea, precisamente, de parte de un mando de la Policía Nacional.
Lo dicho, a esta gente, a la que tan bien le ha ido con los mitos y las mentiras, no le importa -de sobra tiene micrófonos y rotativas para ello- contaminar las cortas entendederas de algunos ciudadanos con afirmaciones tan torticeras.

sábado, 10 de septiembre de 2011

LA PATITA


"Enséñanos la patita" le pedían los siete cabritillos al lobo cuando, atiplando la voz, trataba de hacerse pasar por mamá cabra. El lobo quería entrar a toda costa en su casa para comérselos, pero éstos de sobra sabían que las patas del lobo eran negras, mientras que las de mamá eran blancas.
En el cuento, que pese a todo termina bien, el lobo mete su pata en harina para blanquearla y consigue comerse a seis de los siete cabritillos tras conseguir con su pata enharinada que los hermanos le abran la puerta. Perrault, que da al cuento un final feliz para la cabra y sus cabritillos y otro bien distinto para el lobo, no deja una moraleja clara para el lector, aunque la que quizá podemos extraer es la de que no hay que fiarse de las apariencias y, mucho menos, de quienes con la voz clara o las patitas blancas siguen siendo lobos.
Hace tres días González Pons, con voz engolada y enharinado hasta los codos, nos reveló que su partido "aspira" a crear tres millones y medio de empleos. Fue tan burdo y exagerado el disfraz que a su propio partido, después de tratar de obviar lo dicho por su propio portavoz, se las vio y se las deseó para maquillar tan exagerado maquillaje.
Ayer fue Rato quien, sin disfraces, puso la verdadera patita del PP sobre la mesa. Hay que dejarse de tanto tipo de contrato distinto -vino a decir- y unificar los existentes, ligando salario a productividad. Hay que agradecer a Rato que fuese tan claro y tan rudo -habló de "mano de obra"- y que enseñase la verdadera naturaleza del alma del PP, apuntando a combatir el paro de modo distinto a como se ha hecho hasta ahora, en que se abordaba el problema de la cantidad de desempleados, lo que llamamos paro, cuando lo que hay que abordar es el precio, salario. Menos mal que andaba cerca la CEOE, encarnada por Alberto Nadal, para dejar claro que de lo que se estaba hablando era de rebajar los salarios.
La nota triste de las jornadas escenario de lo anterior la puso José María Fidalgo que plantó sus patazas de oso largo tiempo enharinadas como secretario general de CC OO, haciéndose la foto y alabando los planteamientos del PP.
Dentro de dos meses arranca una campaña electoral crucial para configurar el futuro de este país. Los cabritillos deberían saber ya suficiente sobre el lobo y sus artimañas, pero en la vida real, a diferencia de lo que ocurre en los cuentos, las cosas acaban como acaban y no siempre acaban bien.
A Mariano Rajoy le toca hoy clausurar este foro sobre empleo organizado por su partido en Canarias. Sería de esperar que definiese algunos perfiles de lo dicho ayer, pero estamos hablando de Rajoy, de Mariano Rajoy.

viernes, 9 de septiembre de 2011

ESPERANZA Y MOURINHO


No me invento nada, porque fue la misma Esperanza Aguirre la que dijo, ya en la temporada, pasada que ella era "de Mourinho a muerte" (porque) Mourinho es políticamente incorrecto porque siempre dice lo que piensa, caiga quien caiga, y a ella le gusta lo políticamente incorrecto.
De eso no cabe duda, a Esperanza Aguirre le encanta decir lo que piensa. Mejor dicho, la presidenta de la Comunidad de Madrid dice lo que le encantaría que pensasen los madrileños, cosa que consigue más a menudo de lo que sería saludable, entre otras cosas, porque dice lo que piensa, pero eso no significa que lo que piensa sea lo correcto ni, mucho menos, que lo que dice sea la verdad.
Si esperanza Aguirre es de Mourinho "a muerte", si le admira, si dice que "un partido de fútbol puede ser aburrido, pero una rueda de prensa no", es porque, en el fondo, piensa que Mourinho y ella mismas son almas gemelas.
Si Esperanza Aguirre no le ha metido el dedo en el ojo a nadie en público, me resisto a creer que no lo haya hecho en privado, es porque, probablemente, no lo ha necesitado. Sin embargo son muchos los dedos que "de palabra" ha metido en los ojos de la honorabilidad de aquel que tiene el valor de ponerse en su camino.
Ahora mismo se ha empeñado en metérselo a los maestros, primero llamándoles vagos con más o menos sutileza o, como hizo ayer, despreciando su protesta, atribuyéndola a liberados sindicales o interinos.
Ese "desparpajo" que no es más que mala educación y falta de escrúpulos, parece gustarle a muchos madrileños y, sobre todo, a la derecha más montaraz e inculta, a ese "tea party" cañí, heredero de los peores años de este país, esos en los que las ideas se imponían a cristazos y que alguna prensa parece empeñada en resucitar.
Y no es sólo en la "boca que se equivoca" en lo que Aguirre se parece a Mourinho, también en que, como el héroe-villano del Real Madrid, tiene a quien encargarle las patadas y las zancadillas. Luego, basta con acusar a los demás de "hacer teatro" o, a la vista del revés de las encuestas, pedir perdón.
Me pregunto por qué, si tanto se gustan y tanto se quieren, no se casan y se van a Las Azores a pasar su luna de hiel.

jueves, 8 de septiembre de 2011

PERO... QUÉ HA FUMADO PONS


Hace unos años, cuando alguno de nuestros amigos decía disparates o exageraba descaradamente la realidad se le decía eso de "pero tú qué has fumado", en clara alusión a los porros o "petardos" que empezábamos a fumar creyendo que habíamos inventado la pólvora. Con el tiempo aprendimos que la pólvora ya estaba inventada y siempre ha habido quien no ha necesitado "echarse un peta" para tener alucinaciones.
Ayer lo dejó claro Esteban González Pons, vicesecretario de Comunicación del PP, que se sacó de la chistera nada menos que tres millones y medio de empleos. Y es que, haciendo las cuentas de la lechera camino del mercado, ha descubierto que lo mejor es que el dinero no esté en manos del Estado, sino de los emprendedores -eufemismo que se emplea en lugar de empresarios a causa de la mala imagen que arrastran con su mala costumbre de despedir y subemplear- y que, dándoselo a un millón de estos seres tan beatíficos como mitológicos, cada uno de ellos creará tres puestos de trabajo, con lo que el problema del paro dejará de serlo.
Parece que al amigo González Pons ni le ha leído de niño la fábula de Esopo versificada por Samaniego ni ha escuchado ese chiste malicioso que se hacía de aquella promesa electoral de Felipe González en las elecciones de 1982 de crear ochocientos mil puestos de trabajo que ante el escaso éxito obtenido -no en las elecciones, porque las ganó sobradamente, sino en la creación de empleo- se decía que lo que había dicho Felipe es que iba a crear "ochocientos o mil" puestos de trabajo.
Desde aquel fiasco no recordaba yo a nadie tan osado como para repetir apuestas como esa, hasta que González Pons, el gato de Cheshire del PP, decidió ayer cuadriplicarla.
Pese a lo que de bufo tiene el asunto, la cosa mueve poco a la risa, porque hay cuatro millones y medio de personas con derecho a uno de esos puestos de trabajo que llevan meses, si no años, esperándolo y jugar con esas cosas no debería estar en el manual de campaña de un político; más bien al contrario, debería figurar en el capítulo de contraindicaciones.
Al parecer, el mecanismo seguido por Pons fue el de multiplicar por tres cada uno del millón de emprendedores que, según Rajoy, necesita este país, una cifra que, muy probablemente, obtuvo el candidato del PP, restando al número de parados el llamado "paro estructural" y dividiendo el resultado por tres.
En resumidas cuentas, o González Pons se había fumado un canuto antes de comparecer ante la prensa o cuando Rajoy explicó su fórmula. Lo cierto es que ni siquiera convenció a sus subordinados que retiraron tal "genialidad" de la nota en que resumieron la rueda de prensa en que la dijo. Además, si la cosa fuese tan sencilla ya se le habría ocurrido a José Blanco.

miércoles, 7 de septiembre de 2011

Sé que es pedir mucho, pero bastaría con que quienes acudan a votar el próximo 20-N hiciesen un poco de memoria para comenzar a sentar las bases de un país distinto y mejor del que ahora mismo tenemos. Bastaría con un poco de memoria y otro poco de realismo y honradez.
Parece claro que desde el Partido Popular se van a pasar lo que queda de aquí a ese 20-N enseñándonos el álbum de fotos -convenientemente censurado- del tío Josemari, lleno de fotos de grúas, hormigoneras y bloques de pisos, para evocarnos los coches de lujo, los viajes al Caribe y los chalés, escondiéndonos, eso sí los parajes perdidos, convertidos hoy en ciudades fantasma, las hipotecas asfixiantes y las letras sin pagar.
Nos enseñarán también las fotos de Aznar como líder mundial "llevando a España al lugar que merece en la Historia", escondiéndonos las de los trenes del 11-M de 2003 o las de un Aznar triunfante de bolo en bolo, de conferencia en conferencia, segando la hierba bajo los pies de España y los españoles y a sueldo de ese benefactor de la Humanidad que es Rupert Murdoch.
No nos explicarán que de aquellas burbujas vienen estos sueños rotos ni nos dirán que el Estado ya no hace caja porque recortaron los impuestos -y el PSOE les siguió- con la misma alegría que hoy recortan el Estado de Bienestar y el empleo público.
Van a hacer falta mucha memoria y mucha saliva para convencer a quienes tenemos cerca de que no es posible, como prometen, recaudar más con menos impuestos. Van a hacer falta mucha memoria y no menos saliva para decirle a la gente quiénes son estos señores del PP que no dudan en arruinar la sanidad y la enseñanza pública, para convertirlas en un derecho residual para inmigrantes y pobres, mientras "nosotros", los pudientes, nos convertimos en usuarios de sus hospitales privados y sus colegios pagados con el dinero de todos.
Eso es lo que están haciendo en Madrid desde hace años, convertir una sanidad excelente con unos excelentes hospitales en una cadena de hoteles de nueva planta sin medios materiales ni humanos suficientes, porque se ha desnudado el santo de los grandes centros para vestir el otro santo de las "oportunidades de negocio".
Exactamente lo mismo que están haciendo con la enseñanza pública, refugio de muchas familias en dificultades que ya no pueden pagar un colegio "pijo", que se está deteriorando intencionadamente recortando sus plantillas de profesores y aumentando las ratios de horas y alumnos por profesor, para que los padres que se refugiaron en ella vuelvan al redil ideológico de la privada y la concertada.
Nada de lo que está pasando no tiene un origen y una consecuencia y nuestra obligación es recordar ese origen e imaginar la consecuencia. Si lo hacemos, nos irá mucho mejor.

martes, 6 de septiembre de 2011

AMISTADES

Ayer me fui a la cama tratando de encontrar una explicación a ese terrible distanciamiento que acaba produciéndose, al menos en España, entre los dirigentes políticos y esa masa sin rostro que hemos dado en llamar ciudadanía. Hoy he llegado a la conclusión de que todo se debe a que uno tiende a interpretar el mundo en función de los amigos que tiene y, con el paso del tiempo, quienes ostentan el poder acaban por no tener amigos digamos "normales" y viven rodeados de poderosos.
Estaba yo en éstas, cuando me he encontrado con la foto de Rupert Murdoch y su joven esposa Wendy, que acaba de revelar que Tony Blair fue el padrino de su hija, algo que explica y deja una preocupante neblina de desconfianza sobre las relaciones del poder y la prensa en el Reino Unido, a las que poco o nada tienen que envidiar las que se acostumbran por aquí.
Qué decir entonces de la boda de la hija del matrimonio Aznar con un tiburón de los negocios como Alejandro Agag, al que llegó a colocar en el Parlamento Europeo y, allí, como secretario del Partido Popular Europeo. Por cierto, las fotos de aquella boda en El Escorial contestarían con poco margen de error a la pregunta de quién ostenta el poder, corruptos y corruptores incluidos, en España.
Creo que lo que le ha pasado a Zapatero y a muchos "pijocialistas", que también los hay y muchos, es que hace tiempo que no ven a un obrero, por no decir a un pobre. Por eso la imagen que se forman de la realidad está deformada y los análisis que deberían hacer sobre ella, los hacen más bien sobre esa otra realidad de papel, que son las encuestas que acostumbran a mentir de parte, o sobre las que les cuentan sus amigos que se perecen más a Murdoch que a la señora que hace cola en la pescadería.
No pido con esto que nuestros presidentes se conviertan en franciscanos. Me conformaría con que, de vez en cuando, con o sin disfraz entraran en contacto con esa otra realidad sufriente para la que los meses tienen días de más, exactamente los que no cubren sus ingresos.